22 mayo 2017
8 increíbles usos de la miel que no conocías
La miel es mucho más que un endulzante natural. Cuando sepas todas las propiedades que tiene, seguramente comenzarás a usarla para todo. Este delicioso producto, creado por las abejas, no sólo es un alimento muy saludable, también puede servir como un remedio para muchos males. Tratar heridas, facilitar la cicatrización, lavar el cabello, combatir la tos, entre otros. Y por si fuera poco, tiene una inusual composición química que la hace durar indefinidamente, sin descomponerse.
En primer término, hay que saber elegir la miel, ya que en muchos lugares se venden productos que no son 100% naturales o están adulterados. Idealmente, deberías comprar uno que esté solidificado, pues esto significa que no ha sido expuesto a altas temperaturas. A continuación, te mostramos 8 usos que se le pueden dar a la miel, para que vayas tomando nota y comiences a tener una vida más saludable, con una solución ultra natural:
Combate la tos
Un estudio realizado en 2007 por la Penn State College of Medicine, que incluía a 139 niños, descubrió que la miel de trigo sarraceno superó en resultados al supresor para la tos, dextromethorphan (DM), calmando las toses nocturnas y mejorando el sueño. Otro estudio, publicado por Pediatrics, incluyó a 270 niños entre los 5 y 7 años de edad con tos nocturna por resfríos comunes. En éste, los niños que tomaron dos cucharadas de miel 30 minutos antes de irse a la cama, tosían menos severamente y eran menos propensos a perder el sueño.
Puedes hacerte un té reponedor para combatir la tos con cáscaras de limón, naranja, jengibre, canela, tomillo y dos cucharadas de miel de abeja.
Ayuda a la memoria
Según un estudio reportado por Reuters, 102 mujeres sanas en edad de menopausia fueron asignadas a consumir 20 gramos de miel al día, a comenzar una terapia de reemplazo de hormonas que contenía estrógeno y progesterona, o bien, a no hacer nada. Después de cuatro meses, las mujeres que tomaron la miel o las pastillas hormonales recordaban una palabra más que el resto. A pesar de todo, estos resultados fueron bastante cuestionados por otros científicos, por la poca diferencia de los números. Pero algo es algo.
Cura y cicatriza heridas
En numerosos estudios, la miel ha sido considerada efectiva en el tratamiento de heridas. En una investigación noruega, una miel terapéutica llamada Medihoney (Medimiel) y una miel del bosque noruego, lograron destruir todas las cepas de bacteria en una herida. En otro estudio, 59 pacientes que sufrían de heridas y úlceras en las piernas, de los cuales el 80% no se pudo curar con tratamientos convencionales, fueron tratados con miel sin procesar. Todos menos uno de los casos mostraron mejoras notables luego de aplicarse miel. Básicamente, esta tiene propiedades antiinflamatorias y estimula el sistema inmunológico. Solamente tienes que dejar que la miel se seque sobre la herida e ir repitiendo la aplicación hasta que mejore.
Ayudarte a metabolizar el alcohol
El Centro Médico Langone de NYU, reveló que la miel ingerida oralmente puede “incrementar la capacidad de tu cuerpo para metabolizar el alcohol, limitando la intoxicación y reduciendo el nivel de alcohol en la sangre rápidamente”. Esto también lo confirmó María del Carmen Seijo, miembro del Departamento de Biología Vegetal en la facultad de Ciencias de la Universidad de Vigo, España, en una entrevista al diario El País.
Regulador intestinal
La miel es un remedio muy efectivo para el intestino, ya que actúa como laxante suave para favorecer la evacuación, a la vez que nos ayuda a combatir los parásitos intestinales. Para potenciar su virtudes, debes tomar cada mañana en ayunas un vaso de agua caliente con una cucharada grande de miel y una cucharada grande de vinagre de manzana sin pasteurizar.
¡Adiós a la caspa!
En un estudio que involucró a pacientes con dermatitis crónica seborreica y caspa, se les pidió a los participantes que aplicaran miel diluida con un 10% de agua tibia en sus áreas problemáticas, y la dejaran reposar por tres horas antes de enjuagar con agua tibia. Para todos los pacientes, la picazón se esfumó y la piel escamosa desapareció dentro de una semana. Las lesiones en la piel fueron completamente curadas dentro de dos semanas, y los pacientes presentaron mejoras en la pérdida de cabello. Además, al aplicarla semanalmente durante seis meses, los pacientes no presentaron signos de recaída. Si te gustaría hacer la prueba, puedes hacerlo diluyendo una cucharada grande de miel en 200 ml de agua.
Puede ayudar a pacientes con cáncer
La Clínica Mayo informó que la miel puede ser una prometedora y económica manera de prevenir que sus pacientes con cáncer, tengan un número bajo de glóbulos blancos por culpa de las quimioterapias. En un estudio, el 40% de los pacientes con cáncer, quienes estaban con riesgo de tener neutropenia (una cuenta muy baja de glóbulos blancos), no sufrieron de más episodios después de tomar dos cucharadas de miel terapéutica al día durante la quimioterapia. A pesar de los resultados, esto aún necesita una mayor investigación para comprobarse.
Te dará energía
La miel nos despeja y nos mantiene activos. Su consumo moderado no solo es recomendable para personas que realizan esfuerzos físicos, sino también para cualquiera que pretenda afrontar con más energías su jornada. “La miel es un producto que contiene principalmente azúcares simples de origen vegetal, como la fructosa y la glucosa. Estos azúcares proporcionan energía fácilmente asimilable por las células. Se considera que la energía que proporcionan 100 gramos de miel, es de 320 kcal. A modo indicativo, una cucharada de miel lleva, aproximadamente, 30 gramos”, explicó Seijo.
A pesar de su gran cantidad de usos maravillosos, la miel debe ser consumida moderadamente, ya que solo una cucharada tiene 64 calorías. También, es crucial que sepas que la miel no es apta para niños menores de 1 año, ya que puede contener la bacteria que causa botulismo infantil.
