Avengers: Infinity War. Crítica Maestra (sin spoilers)

También conocida como…

 Thor Ragnarok 2: Ragnarín.

Avengers: Apocalypse.

Todos: The Movie.

American Crime Story: Thanos.

Hawkeye No Está, Hawkeye Se Fue.

Guerra Civil 2: Guerra Interplanetaria.

The Wakanda Dead.

Etc.

Bueno mis queridos hermanos de la religión Marvel, es hora de una nueva misa. El sacrificio no ha sido menor: llevamos diez años de nuestras vidas invertidas en estos personajes. Hemos gastado cientos de miles de pesos en entradas, monitos, poleras, Funko Pops, libritos y accesorios. Hemos aplaudido al final de todas las películas incluyendo Age of Ultron y Thor 2. Hemos acumulado un total de ciento ochenta y siete minutos de espera durante créditos finales, solo para ver diez segundos más de película (fuente: Neil deGrasse Tyson). Lloramos cuando murió el agente Caulson y después no vimos la serie donde resucitó. Porque hemos dado todo eso, nos merecemos una película como Avengers: Infinity War.

Thanos

Por si no saben, Infinity War es lo que pasa cuando ese personaje Thanos por fin deja de sonreír, se para de su trono espacial y decide salir en la película, ahora desde el principio. Al compadre de pronto le bajó la urgencia y necesita imperiosamente juntar todas las piedras mágicas del universo, para así tener todo el poder del cosmos y destruirlo todo, para ver si por fin puede estar tranquilo en la casa.

Porque contrario a lo que denota su aspecto, este Thanos no es un sujeto muy equilibrado que digamos. Es como un Hulk cara de metalero pero con la piel púrpura, con un guante brígido que es como la Copa Mundial Caballero del Zodíaco, y cada vez que empuña su guante pasa algo malo y muere la gente, porque resulta que el guante tiene ni más ni menos que las piedras mágicas de los siete colores, todas con distintos poderes cósmicos, y menos mal que tiene el guante huacho no más, que si tuviera los dos habría muerto hasta yo.

Es tan poderoso Thanos que todos los personajes de las más recientes películas Marvel deben unirse para derrotarlo, y desde el minuto 001 todos los personajes del póster empiezan a cruzarse y a unirse en la batalla para que Thanos la corte con la leserita.

Todos los personajes brillan

Les juro, apenas empieza uno queda ahí todo emocionado porque no se puede creer que Thor esté en la misma escena que Drax y Groot, otros personajes de nombre monosílabo. Lo juro, uno no alcanza a decir ni “Stan Lee” y ya han salido en pantalla todos los protagonistas de las películas unitarias por las cuales hemos pagado entrada individual, personajes como Dr. Strange, Spider-Man, Black Panther, Thor o Ragnarok, todos tirándose chistes y siendo ellos mismos, los de siempre. Y uno ahí feliz sintiendo que nunca había visto tanto superhéroe junto, aunque a estas alturas ya deberíamos estar acostumbrados.

La dura que es imposible borrarse la sonrisa de la cara cuando Star Lord se encuentra con Thor, por ejemplo. O cuando el doctor Stephen Stark se encuentra con el genio millonario Tony Strange. O esa alegría que da el puro ver al guatón amigo de Spider-Man. De alguna forma, esta película consigue el milagro de que todos los personajes sigan brillando, de que todos te sigan cayendo bien y que todos te importen. Es como ver Parks and Recreation, pero con escenas increíbles de batallas espaciales y/o de alto impacto sobre el medioambiente.

Y tal como los superhéroes deberían hacer con Thanos, es mejor rendirse. Uno lo pasa Sus Scrofa Domesticus (chancho pos), y puede olvidarse un rato de los problemas del mundo y de la película. Porque sí, se trata de muchas escenas de gente que a uno le cae bien peleando contra seres indestructibles, una y otra vez, al infinito y más allá. Porque no nos hagamos los tontos, aquí no hay mucha historia que digamos salvo el desfile de personajes y batallas.

Sin grandes giros pero con un poderoso villano

No se esperen las historias alucinantes de las últimas películas Marvel, como esa de hermanas perdidas con sed de venganza (Thor Ragnarok), o la otra de primos perdidos con sed de venganza (Black Panther). Aquí no hay traiciones ni secretos que salen a la luz a lo Civil War, tampoco hay dilemas morales como en Winter Soldier, ni siquiera es tema que los personajes logren unirse y trabajar juntos como en la primera Avengers. Esta cuestión se va más por el lado “villano increíblemente omnipotente quiere destruir el planeta”. Más en la onda Age of Ultron, o incluso X-Men: Apocalypse.

Las cosas como son, cabros, esta es mucho mejor que esas películas, pero anda por ahí no más con sus villanos y sus planes extremistas. La diferencia en este caso es que Thanos es Hitler + Hulk + Bling Bling = Indestructibilidad absoluta, y ahí no hay nada que hacer. Thanos no anda nada con cosas ni es material de los ultrones. El compadre pone la pata en el suelo y PAF. Muerte.

Igual a toda esa gente que anda reclamando por anticipado por los SPOILERS,  lamento informarles que esta película no es ni Los sospechosos de siempre ni Sexto sentido ni Nueve reinas, y absolutamente nada de lo que uno diga les puede arruinar nada, porque no hay grandes giros. No se descubre que Thanos era el tío Ben, ni Thor se saca el parche en el ojo y resulta que es Nick Fury disfrazado a lo Dónde están las rubias, ni tampoco Ant-Man se mete a la oreja de Thanos y le da otitis y lo derrota. A lo más Tony Stark estrena un traje nuevo que es capaz de generar metal, armas y municiones de la nada gracias a la nanotecnología (fuente: Magia). Lo que estoy tratando de decir es que relajen la vena y déjense de alegar, no hay forma en que esta película se les arruine porque un gil les cuenta algo que pasa. Si fuera así nadie iría al cine nunca, y se contentarían con leer los resúmenes, ¿o no?

Dicho eso, en esta película pasan cosas heavy. Pero todo sería mucho más bacán si uno se creyera por un milisegundo que todas esas cosas son irreversibles, y que no las van a deshacer antes de los créditos de la próxima película. Así que no le pongamos tanto color que esto no es El imperio contraataca ni por si acaso, uno porque Thanos no está contraatacando, dos porque no es el papá de nadie, y tres porque no es Star Wars. Lo que sí, es una película muy entretenida que decidió regalonearnos cortando todas las cosas aburridas (como la historia), y se quedó con las puras partes buenas. Una detrás de otra, de principio a fin, por dos horas y media.

Así que felicidades queridos hermanos de la religión Marvel. Vamos tranquilos al cine a gozar, y recuerden que hay que quedarse hasta el final de los créditos para ver el teaser de las películas venideras y así conseguir que nos den ganas de verlas. Ja, como si lo necesitáramos.