Picoteo para despedir el 2013

Despedimos el año que se va y le damos la bienvenida al que llega. Se juntan las familias, los amigos y hacemos todo tipo de brindis por lo bueno que traerá esta nueva etapa. Hay que celebrarlo de forma especial y recibir a nuestros invitados con alegría y, obviamente, un rico picoteo.

Me encanta estar en la cocina con todo lo necesario para preparar distintas recetas que sean ricas y que también se vean lindas sobre la mesa. La presentación de nuestras preparaciones es clave porque muestra que es una fecha especial: usar colores fuertes y texturas diferentes hace que todo se vea más lindo.

Me encanta la comida mediterránea y sus ingredientes, por eso los uso la mayoría de las veces para armar un aperitivo que sea simple y no nos tenga toda la tarde trabajando, porque tampoco es la idea.

Mi favorito es la bruschetta, un antipasto típico de Italia y que no falla. En su origen son el aceite de oliva, el ajo, la albahaca, el tomate, la sal y la pimienta los ingredientes para armarla, pero lo entretenido es que podemos combinar de todo y preparar distintos tipos.

¡Manos a la obra!

Para preparar las bruschettas, lo primero es pensar en los ingredientes que más nos gustan. ¿Ya lo pensaron? Después de eso, cortamos el pan en rebanadas (puede ser pan de campo, una baguette o incluso con una marraqueta). Lo untamos con aceite de oliva y sal y lo metemos al horno (o a la parrilla si tenemos una).

Mientras tanto, preparamos lo que pondremos sobre el pan. Estas son mis combinaciones favoritas: rúcula, tomate cherry y prosciutto; pesto de albahaca, mozzarella y aceitunas; salmón ahumado y ricotta. Todo tiene que estar aliñado antes de que saquemos el pan para aprovechar que sale calentito. Sacamos las rebanadas del horno y pasamos fuerte un ajo cortado por la mitad, para que absorba todo el sabor. Armamos las bruschettas poniendo los ingredientes sobre cada rebanada de pan ¡y listo! Para terminar podemos incluir ciboulette o cualquier hierba para darle un toque de sabor y, además, decorar.

Aprovechemos que la noche de año nuevo el aire está tibio y disfrutemos de la terraza, podemos arreglar la mesa con muchas velas y flores, servilletas de colores y los platos lindos que nunca usamos. Lo importante es que sea una noche especial y disfrutemos, obviamente, con una copa de champaña para hacer el brindis para recibir este nuevo año, lleno de cosas buenas.

¿Cuál es tu receta estelar para el 31 de diciembre?