LG G5 SE Review: El smartphone que cambia las reglas del juego

Hace mucho, mucho, tiempo, en un lugar no tan, tan lejano, existían unos novedosos dispositivos llamados celulares, que servían para dos cosas:

• Llamar a tus seres queridos
• Noquear a tus enemigos

Aunque eran la última chupada del mate en cuanto a tecnología, nadie disfrutaba mucho usándolos. Eran grandes, eran pesados, eran feos. Ni siquiera el juego de la «Viborita» alcanzaba a compensar sus deficiencias. Claro, eran otros tiempos y no conocíamos nada mejor… hasta que vino la era de los smartphones.

Fue un cambio radical. A las pequeñas pantallas pronto les llegó la adolescencia y se pegaron un estirón. Los componentes internos también se complejizaron: pasaron de ser nivel calculadora a ser nivel computador. De no hacer casi nada en estos aparatos, pasamos a hacerlo todo (¡hasta atrapar pokemones!).

Bien se podría pensar que ya alcanzamos la cúspide del smartphone ¿qué más se puede mejorar? ¿más RAM? ¿más pulgadas? De eso ya tenemos de sobra.

Entonces ¿Llegamos a punto de perpetuo estancamiento creativo? ¿Estamos condenados a un aburrido y predecible escalamiento de bytes, pixeles y pantallas?

Yo veo al LG G5 SE, más que como un smarthphone, como la evidencia de que la innovación, cuando se busca, siempre sale a la luz. De que es posible remover las cimientos que muchos tenían por inamovibles. De que existen dispositivos que no solo son inteligentes, son inteligentes y más.

Te contamos por qué en la siguiente review.

LG G5 SE: cuando parecía que lo habíamos visto todo

Seré honesto. Cuando vi por primera vez, por allá en febrero, al sucesor de la Serie G en video, acompañado de un sobre-excitado periodista tecnológico que desencajaba la parte inferior, pensé: «Chuuu, se lo echaron». Pero no. Era parte del juego, el truco bajo la manga que tenía la marca surcoreana para volar nuestras cabezas.

Con el LG G5 SE finalmente en mis manos, ya se imaginarán lo primero que hice: extraer la parte modular una y otra vez. Ésta está firmemente unida al cuerpo principal, y solo se suelta al presionar un botón al lado izquierdo.

Por si no lo saben, esto permite conectar una variedad de módulos, conocidos como LG Friends, al smartphone, para irlo potenciando en distintas áreas: reproducción de audio, uso de la cámara, mayor duración de batería, etc. El G5 es un hub de entretención para todo tipo de personas: melómanos, fotógrafos, amantes de la aventura, gamers expertos en agotar baterías. Para todos, LG cuenta con accesorios que se integran, ya sea mediante el compartimento físico o mediante su software, con este modelo. Por eso me gusta referirme al G5 SE como más que un smartphone: un post-smartphone.

Aunque el aspecto modular es, claramente, lo más llamativo del celular a primera vista, el resto del diseño no tarda en capturar la atención. Un cuerpo metálico de esquinas ligeramente más ovaladas que en el G4, con el cristal en la parte superior siguiendo una leve curvatura muy atractiva al ojo.

LG optó esta vez por cambiar ciertas características físicas que se habían hecho clásicas en modelos anteriores. Que no cunda el pánico, el botón de prendido sigue estando atrás (ahora también es lector de huellas), a milímetros de la posición natural de nuestros dedos. Los botones de volumen, por otro lado, tuvieron una mudanza hacia el borde izquierdo superior del smartphone.

En la parte trasera, las cámaras (sí, en plural, de las que les hablaré luego) sobresalen ligeramente. El USB tipo C se ubica en el borde inferior, mientras que la toma de auriculares se ubica en el borde opuesto.

Con dimensiones de 149.4 x 73.9 x 7.3 mm y 156 gramos, el LG G5 SE se siente en la mano como lo que es: un sólido y compacto dispositivo de punta.

Pantalla LG G5 SE

LG nos tiene ya mimados con excelentes pantallas, y el G5 SE no es la excepción. Sus 5,3» pulgadas de panel LCD IPS tienen una resolución QHD de 2560 x 1440 donde juegos, películas e imágenes resaltan con una excelente fidelidad de colores, saturación perfecta y contrastes ideales. En serio, aproveche de ver «El señor de los anillos: El retorno del rey» en la app de Netflix y hasta los orcos se ven hermosos en esta pantalla.

En este apartado, la gran novedad es la pantalla Always-on, la que promete extender la batería hasta el más allá ¿Cómo? La acción más frecuente que realizamos en nuestros smartphones es ver la hora y nuestras notificaciones. Hacerlo, imaginarán, involucra obligatoriamente desbloquear la pantalla, lo que ocupa un pequeño porcentaje de la batería, pero que repetido cientos de veces, se termina convirtiendo en uno de los principales devoradores de energía.

Always-on, como lo indica su nombre, significa que ya no tendremos que hacer esto porque la pantalla siempre estará prendida. Una vez bloqueada la pantalla del LG G5 SE, un pequeño cuadrado queda prendido de forma permanente, mostrándote notificaciones y la esencial hora. LG logró que el gasto energético sea mínimo, al hacer que la función se desactive sola al ingresarlo en bolsos o bolsillos donde no nos será útil.

Durante los días que use el smartphone, la pantalla Always-on fue mi mejor amiga y sin exagerar. La batería llegaba de sobra al final del día y siempre se agradece saber todo lo esencial en un vistazo. Always-on tendrás, always, un espacio en mi corazón.

Desempeño

Con 3 GB de memoria RAM y un procesador Qualcomm Snapdragon 652, el LG G5 SE tiene lo necesario para hacerlo todo sin demoras.

Probé varios juegos recientes y las gráficas se vieron fluidas y los tiempos de carga se hicieron rapidísimos. También en el departamento de multitasking cumplió todo con nota sobresaliente. Yo soy un fanático del QSlide, una característica única del software LG que te permite tener una ventana flotante con, por ejemplo, un video. Aún con éste en reproducción, pude navegar en Chrome y usar otras apps a la vez sin demoras ni irritantes cortes.

Una buena noticia para los gamers: el LG G5 SE incluye un cargador Fast Charge que se conecta al USB-C y, su nombre no es broma, carga el celular muy rápido. Onda, Flash Gordon rápido. En 20 minutos carga alrededor de un 50% y toma apenas una hora para cargar la batería completa (hablamos de 0% a 100%).

Cámaras

Otra característica icónica de la Serie G son sus grandes cámaras. En el LG G5 SE hablamos de tres (sí: uno, dos, tres) de ellas.

Por el lado frontal tenemos un lente de 8 megapixeles, más que capaz de tomar excelentes selfies. Esto es enormemente facilitado por el ya reconocido software de reconocimiento gestual de LG. Haces un puño con la mano y la cámara se accionará automáticamente en 3 segundos.

Luego tenemos dos lentes traseros. Uno de 16 megapixeles, capaces de capturar las mejores fotografías de la categoría, según publicaciones como Android Authority. Y es así. Es increíble la reproducción de colores y detalles que se observan en fotografías capturadas por el lente principal de G5 SE, ya sea a distancia o cercanas. De hecho, es un poco incómodo luego usar otros modelos donde simplemente todo parece menos llamativo.

Luego tenemos otro lente trasero, que, pese a que es de 8 megapixeles, es tan divertido de usar como la cámara principal, gracias a su gran angular que captura todo en un ángulo de 135 grados, más que el ojo humano.

Al activarlo y  desactivarlo se puede apreciar la inmensidad que captura el gran angular, siendo ideal para fotos de grupos numerosos en espacios reducidos, y de paisajes o estructuras que son demasiado grandes para capturar con el lente principal.

El software del G5 SE te permite combinar ambas de varias formas, por lo que es fácil pasarse horas probando cambios de perspectiva. Es, de verdad, todo un juego sacar fotografías con este post-smartphone.

Jugando con la LG CAM 360

¡Y hablando de juegos! Tuve la oportunidad de probar el G5 SE en compañía con uno de los LG Friends que les mencionaba. En este caso la LG CAM 360, una pequeñísima cámara con dos lentes de 180 grados que captura, literalmente, todo tu mundo en imagen y video.

A diferencia de otros Friends, la LG CAM 360 se integra mediante el software y no mediante el compartimento físico. Gracias a la app preinstalada LG Friends Manager, la conexión es casi instantánea. Ingresar, elegir el dispositivo y ya. Ni siquiera es necesario prender la cámara, porque la app lo hace automáticamente.

Desde la app se puede observar lo que capturan, en vivo, ambos lentes de la LG CAM 360 y también hacer capturas. También puedes ver las imágenes tomadas en 360 grados y rápidamente compartirlas en redes sociales (¡Facebook permite navegar imágenes 360°!).

Sobre la LG CAM 360 para qué decir. Fue el juguete preferido de la oficina durante todo el tiempo que la tuvimos y así lo prueban las abundan imágenes en 360 grados de nuestras redes sociales.

Conclusiones

Podría seguir casi indefinidamente escribiendo sobre el LG G5 SE. Además del aspecto modular, su lente de gran angular y su pantalla Always-on, hay innumerables pequeñas cositas, casi sutilezas, que te hacen pensar que volver a un smartphone corriente será como volver a una era antigua de celulares.

EL LG G5 SE es teoría y práctica aplicada de que un smartphone, hoy por hoy, debe ser más que solo un smartphone, y lo logra mediante el ejercicio lúdico: usar el G5 SE nunca se sintió una tarea o una simple sucesión inimaginativa de acciones, fue un juego constante cuyas reglas cambiarán la industria de los smartphones de ahora en adelante y para siempre.