LG Blog

Dolor de cuello: cómo mejorarlo con Yoga

Dolor de cuello… ¿a quién no le ha pasado? Ya sea por estrés, un movimiento brusco o una mala postura, es muy molesto y no queremos que dure, mucho menos que se convierta en algo peor.

Sabemos que una vida sedentaria puede llevarnos a tener más molestias que si practicamos actividad física que nos haga movernos, flexibilizar los músculos y botar tensiones. Y con la velocidad a la que vivimos la vida, es prácticamente una obligación.

Yoga al rescate

Como ya les he contado, esta disciplina sirve para todo. También hay posturas de yoga que nos ayudan a fortalecer los músculos del cuello, algo que en realidad no hacemos nunca en nuestra vida diaria, pero si queremos relajarlo y dejar que se estire y descanse, acá hay cuatro posturas que pueden ayudarnos a lograrlo:

Para armarla, apoya las manos a la altura de los hombros y abiertas al mismo ancho, con la espalda recta. Las rodillas están apoyadas en línea con las caderas y separadas al ancho de las mismas (si te molesta el peso sobre las rodillas puedes poner una manta). La espalda está plana, como una mesa. Inhalas y al exhalar, relaja la cabeza dejando que cuelgue y entra la pelvis, permitiendo de esta forma que la espalda se redondee. Luego vuelve a la mesa al inhalar.  Si lo que tenemos en el cuello es una lesión y no una molestia, es mejor dejarlo alineado con el torso para no forzarlo más de la cuenta.

El dolor de cuello es delicado, por lo que si es fuerte les recomiendo ver a un especialista antes de hacer cualquier tipo de movimiento. El yoga nos invita a movernos con conciencia, sin apuro, percibiendo el movimiento de nuestro cuerpo y eso es todavía más importante cuando tenemos molestias que debemos observar. Es importante una práctica inteligente y con incomodidades relacionadas al estiramiento paulatino de los músculos, no a dolores localizados.