LG Blog

Cómo y por qué hacer compost casero

El calentamiento global está de moda y no por las mejores razones, por eso, todas las ideas para reutilizar desechos son bienvenidas. El compostaje es una de ellas, y como el reciclaje, podemos hacerlo en nuestra casa si queremos dedicarle un pequeño espacio, y otro poco de tiempo.

Lo que hacemos para lograr el compost es descomponer materiales orgánicos mezclados con agua y algo de aire. Esto incluye todo lo que venga de un organismo vivo: frutas, verduras, hojas, pasto, etc. Pero para no arriesgarse innovando, siempre es mejor preguntarle a los que saben. El Ministerio de Medio Ambiente es uno de ellos, y nos recomienda seguir estos pasos sobre cómo hacer compost casero a todo ritmo:

Cómo hacer compost en casa:

También es importante considerar un lugar de suelo parejo y con buen drenaje, que no esté expuesto a viento fuerte. Y algo más: independiente del material que usemos para crear nuestro compost (ladrillos, madera o un bote de plástico), lo importante es que tenga hoyitos repartidos para así poder oxigenar la mezcla. Para facilitar la descomposición les recomiendo cortarlo en pedazos más chicos: eso ayudará a que el proceso sea más rápido.

Y después, ¿qué?

Cuando el compost está listo tiene un color café oscuro y no tiene un aspecto desagradable –o sea no hay gusanos ni se ve la basura–, es todo como una gran masa de tierra. Entonces pasamos el material por una rejilla de 1cm² para devolver lo que queda en ella al contenedor inicial. Y el resto, ¡por fin! Lo usamos como abono para nuestros almácigos, para nuestra huerta, para las plantas, árboles y flores de nuestro lindo jardín.

Cuando lo hagamos, nuestra tierra logrará recuperar su fertilidad porque le agregamos este abono orgánico de alta calidad con nitrógeno, fósforo, potasio, magnesio, calcio y hierro, nutrientes que harán muy felices a nuestras plantitas.

Hacerl compost hoy pensando en mañana

Los costos de deshacerse de desechos orgánicos es muy alto, y si compostamos también estamos ayudando a reutilizarlos y así hacer algo útil con ellos, a agregarles valor. Si lo pensamos bien, estamos haciendo lo mismo que hacen los bosques de manera natural, pero con intención. Es por eso que no se descompone ni tiene malos olores, todo lo contrario, cuando se completa el proceso tiene ese olor a tierra fresca que ya no sentimos mucho en la ciudad.

Tenemos que pensar en cómo las generaciones futuras participarán activamente de cuidar el medio ambiente, por eso creo que esto es algo que se debiera enseñar en los colegios. Es una herramienta para mostrarles a nuestros niños a cómo ser responsables con el medio ambiente, y no sólo ellos sino que con sus amigos; a participar juntos de esta tarea que es para todos. Ellos deben crecer entendiendo la importancia de reciclar y reutilizar, porque muy pronto serán los responsables de cuidar nuestro planeta.

Fotografía: Wikimedia