3 agosto 2015

Mindful eating o alimentación consciente

El mindfulness, o consciencia plena, es la capacidad que tiene la mente de estar presente en un momento determinado. Queda clara la definición, pero lograrlo no es nada fácil. Nuestra mente está acostumbrada a ser hiperactiva, hiperquinética, moviéndose sin parar de un lado a otro, del pasado al futuro, de una idea a la siguiente, de una emoción a otra.

Para un poco

La mejor herramienta para entender el mindfulness es la meditación. Con la práctica de la meditación entrenamos a la mente a estar quieta, en el momento y lugar presentes. No sé si les ha pasado, pero a veces me agota estar todo el tiempo con la mente en mil partes a la vez. A veces es tanto que llega a dolerme la cabeza y necesito sentarme aunque sea cinco minutos para intentar pararla.

No es posible experimentar realmente un momento si no estamos involucrados en él. ¿Les ha pasado tener una conversación muy potente con alguien, o estar en una clase con un profesor está diciendo algo muy interesante y pareciera que todos nuestros sentidos, todas nuestras antenas y toda nuestra percepción están 100% en ese momento? Esa atención es la que debiéramos tener cada vez que comemos.

Cómo lo vamos logrando

El mindfulness se trata de un proceso tanto interno como externo donde nuestros pensamientos y emociones están atentos, pero también lo está nuestro cuerpo. Esto está en cada momento de nuestra vida pero también podemos aplicarlo mientras estamos comiendo; eso se conoce como mindful eating.

Determinar si comemos por hambre o porque sí es el primer paso. Luego viene la parte entretenida: cocinar, es decir dedicarle tiempo a preparar lo que comeremos.Disfrutar ese momento previo mientras estamos eligiendo qué ingredientes usaremos, cómo los combinaremos, y asegurarnos que sea una comida equilibrada para quitar el hambre y a la vez nutrir nuestro cuerpo.

Los sentidos son clave: los olores de la comida, los sabores, los contrastes… el picante, lo suave, lo crocante. Toda esa experiencia que significa comer es casi un rito que deberíamos respetar lo más que podamos.

Esto también nos permite saber que comimos suficiente, para no seguir haciéndolo de manera mecánica. Yo por ejemplo he aprendido a comer una porción y esperar un poco, porque la sensación de saciedad se demora en llegar. Esa información que nos entrega nuestro cerebro también está relacionada con la costumbre, es decir el cerebro no tendrá la información de que comiste si lo hiciste en el auto preocupada de manejar, o viendo televisión.

Volver a aprender

El mindful eating o alimentación consciente también nos acerca a tener una vida más saludable. Aprender qué es lo que le estamos entregando a nuestro cuerpo nos permite ser más selectivos con los alimentos. Además, nos hace parar.

Muchos de nosotros comemos apurados o porque nos conectamos con alguna emoción que nos hace hacerlo. Para eso les recomiendo acostumbrarse, simplemente, a dejar el tenedor en el plato cada cierto rato.Así uno va notando cómo come en realidad, y podemos sentir cuando dejamos de tener hambre a nivel biológico más que mental.

Cuánto vivimos de manera mecánica, sin parar a reflexionar si estamos haciendo lo que nos gusta, si somos felices, si ya no queremos hacer más algo, o si queremos hacer más de otra cosa. Lo mismo pasa con la comida: todos esos escenarios donde vemos a la comida como algo accesorio, cambian cuando le damos la importancia y el tiempo que se merece.

Catalina Avendaño

Compartir

LG OLED TV

LG NanoCell TV

LG InstaView

LG TWINWash

LG Serie K

Telvisores OLED de LG

Negro absoluto, colores perfectos

VER MÁS

@MundoLG

¡No te pierdas nuestras últimas actualizaciones!