¡Viva la comida!

Expertas en alimentación; así somos las mujeres. Conocemos las mil y un maneras para bajar de peso; la dieta de verduras, la de carne y la de batidos; comemos semillas, tomamos litros de agua, pastillas para la ansiedad y pagamos todo el año de gimnasio, convencidas de que esta vez sí cumpliremos.

¿Por qué es tan difícil encontrar una manera para mantenernos en forma, bajar un par de kilos, ponernos la ropa que nos gusta y sentirnos seguras frente al espejo? Porque nos cuesta ser constantes… es que esto de prohibirse cosas definitivamente nos genera más ansiedad. Y nos tentamos una, dos veces, y con eso llega la culpa. Y así nos pasamos la vida.

La comida me hace feliz (a quién no) y no tengo ningún interés en cerrar la boca por los próximos 50 años. La clave, al menos para mí, está en ver el panorama general. Creo que se trata de alimentarse saludablemente, de manera gradual, en vez de partir comiendo lechuga el lunes. Y otra vez el próximo lunes.

Me aburrí de las dietas y hace unos años decidí ordenarme: cuatro comidas al día, evito los carbohidratos y las bebidas, y hago deporte al menos dos veces en la semana. Ni más ni menos. Y cuando no cumplo con lo que propuse (bien seguido), hago lo posible por no ser dura conmigo misma ¡porque todas las otras veces sí cumplí!

Y así me paso los días, haciéndolo de la mejor manera posible porque sé que a veces puedo y otras no… o tal vez sí, pero la verdad, no tengo ganas.

¿Qué piensas tú de las dietas?