Conoce los mejores té para las mañanas
Tomar té es un ritual sagrado para mí. Desde que descubrí las bondades del té rojo, no lo he abandonado por nada el mundo. Por el contrario, mi madre no cambia el Ceylan y mis hijas, adoran el con sabor a frutilla. El caso es que siempre hay un té para todo y para todos.
Acá, una breve lista con los indispensables.
Té Negro
El más popular del mundo. Entre sus propiedades se encuentra la de poseer antioxidantes, ser saciante, bajo en calorías y bueno para el estómago.
En su preparación es importante saber lo siguiente: La intensidad de su sabor varía mucho dependiendo del tipo.
Como curiosidad, te contamos que durante mucho tiempo, fue empleado como moneda de cambio ya que no pierde su sabor con el tiempo.
Té Blanco
Esta variedad de té se encuentra entre los más finos y últimamente se ha vuelto el predilecto de muchos. La explicación de su repentino boom quizás se deba a la masificación del conocimiento de su método de recolección.
Resulta que a diferencia de otras variedades, el té blanco solo recoge los brotes tiernos. Es un té procedente en gran medida de las montañas de la provincia de Fujian, en China.
Posee un gran aroma y entre sus virtudes, se encuentra su fama de “elixir de la juventud” pues es uno de los antioxidantes más potentes que nos ofrece la naturaleza y su alto contenido en vitamina E y C.
Además, posee las mismas propiedades que el té verde, aunque en muchas de ellas es más efectivo y además posee un efecto ligeramente diurético.
Té Rojo
Un té originario en toda regla de China. Específicamente de la provincia china de Yunnan. Es conocido como un “devorador de grasas” ya que un consumo alto de esta bebida ayudará a controlar las grasas de nuestro cuerpo y a eliminarlas de mejor forma, entre otras de sus virtudes, se encuentra la propiedad de ayudarnos a disminuir los niveles de colesterol y de grasa en la sangre.
También tiene propiedades diuréticas y es ideal para aliviar las digestiones pesadas.
Té Verde
Considerado por muchos como una verdadera panacea, el té verde debe sus características a que en su proceso de producción no se fermenta, lo que hace conservar sus propiedades.
Por ejemplo, es un gran antioxidante y ayuda a combatir la retención de liquidos, además de ser muy digestivo, ayudando a perder peso. Por si fuera poco, es rico en minerales, sodio, fluor y vitaminas A, B y C.