Cinco consejos para hacer más rápido tu equipo con Android

Cuando adquirimos un teléfono móvil con sistema operativo Android como el LG G2 o el LG Optimus G, podemos cometer algunos errores en el camino que harán más lento el funcionamiento del equipo, degradando la experiencia de uso y malgastando los buenos recursos de hardware que dispone el smartphone.

Y es que tenemos en el bolsillo una verdadera computadora en miniatura, por lo que al igual que sus contrapartes de escritorio con mouse y teclado, a veces es necesario darle un pequeño mantenimiento para sacarle el máximo provecho y hacer que cada movimiento en la pantalla sea lo más veloz posible.

Además, al hacerlo estaremos prolongando la duración de la batería, ya que un funcionamiento lento es síntoma de que el procesador central de nuestro teléfono se está esforzando demasiado para realizar las tareas y por lo tanto está gastando más energía para operar, por lo que es importante hacer lo posible para ahorrarla.

Acá van algunos consejos para hacer que tu Android sea más rápido:

Utilizar menos widgets y fondos de pantalla fijos

El primer consejo es el más obvio de todos, pero quizás uno de los más importantes. Porque muchas veces nos tentamos a poner la mayor cantidad de “widgets” o iconos interesantes en nuestra pantalla de inicio, sin embargo, éstos consumen recursos que bien podríamos estar ahorrando.

La idea es simple: si de verdad no utilizas ese widget, entonces mejor sácalo. Porque según la herramienta, a veces éstas se conectan automáticamente a Internet o bien poseen animaciones 3D muy pesadas, ambas actividades que ponen más lento el teléfono.

Lo mismo ocurre cuando colocamos un fondo de pantalla animado, el que hará al procesador central y el chip gráfico esforzarse para generar patrones y movimientos que después de un tiempo ni siquiera notaremos, por lo que es mejor optar por fotografías fijas para el escritorio de Android.

De vez en cuando, restaurar de fábrica

Tal como los computadores necesitan de vez en cuando que su disco duro se formatee, el teléfono móvil también se beneficia de dicha práctica. Y es que al realizar una restauración de fábrica, estamos eliminando mucha basura que acumulamos en el tiempo, como archivos innecesarios y aplicaciones viejas que ya no utilizamos y siguen consumiendo recursos en el equipo.

Para hacer la restauración de fábrica, primero vamos al icono de “Ajustes” en Android, luego al menú “Copia de seguridad” y allí presionamos “Reestablecer datos de fábrica”. Cabe destacar que esto eliminará todas nuestras aplicaciones instaladas, documentos, imágenes y datos de cuentas personales que hayamos ingresado.

Desactivar aplicaciones innecesarias

Si llevamos ya un año con el mismo equipo y nunca lo hemos restaurado de fábrica, es buena idea hacerlo. Pero como ya sabemos, eso implica eliminar todos nuestros datos personales y a veces no nos podemos dar ese lujo, especialmente si tenemos poco tiempo como para hacer un respaldo completo de los archivos y configurar desde cero nuestro móvil.

Por eso, para solucionar el tema de la acumulación de aplicaciones innecesarias podemos tomar dos rutas. La primera es desinstalarlas, lo que se consigue ubicando el icono de la herramienta que ya no necesitamos en el menú de apps, mantenerlo presionado y esperar que aparezca el escritorio de Android, para luego arrastrar el icono al tacho de basura que aparece arriba en la pantalla.

Pero hay veces en que el sistema no permite desinstalar ciertas aplicaciones (cuando éstas vienen pre-instaladas desde fábrica), por lo que es conveniente simplemente desactivarlas. Para hacerlo nos vamos al icono de “Ajustes”, menú “Aplicaciones” y arrastramos hacia la derecha para ver todas. Si las presionamos mostrarán el botón “Inhabilitar”, pero atención acá, porque aparecen todas las herramientas que utiliza Android y no solo las apps que vemos en el menú principal, por lo que hay que tener ojo con qué deshabilitar.

Gestionar la memoria RAM

Otro punto importante es gestionar la cantidad de memoria RAM que mantiene en uso el equipo, siendo prudente mantener liberada la mayor cantidad de ella en la medida de lo posible. Lo mejor que podemos hacer es presionar a menudo el botón derecho del teléfono, ese que se ubica en la parte inferior de la pantalla.

Con esto se nos mostrarán miniaturas de todas las aplicaciones que tenemos abiertas en segundo plano, y si bien la finalidad de esta herramienta es acceder rápidamente a dichas apps, también nos sirve para cerrarlas definitivamente y liberar espacio en la memoria RAM. Simplemente las desplazamos con el dedo hacia el lado y se van.

También es posible gestionar qué aplicaciones se ejecutan cuando prendemos el teléfono, las que debemos mantener en la menor cifra posible y sólo con utilidades que de verdad nos sirvan. Para esto recomendamos la aplicación “Startup Manager”, que está en la tienda Play Store y es gratis. Cuando la abrimos, tenemos una lista con todo lo que se abre automáticamente al encender el móvil, pudiendo identificar qué no necesitamos y luego presionar el círculo celeste a la derecha para deshabilitarlo. De todas formas podremos abrir la aplicación más adelante.

Mantenerse al día con las actualizaciones

Finalmente, es sabio aconsejar que cada uno actualice al menos una vez al año su sistema operativo Android, ya que regularmente van apareciendo actualizaciones relevantes que corrigen errores del sistema, añaden nuevas funciones y optimizan el rendimiento.

Para hacerlo, nos vamos al icono de “Ajustes”, luego a “Información del teléfono” y finalmente a “Actualizaciones del sistema”. Ojo que si encontramos una actualización, seguramente ésta demorará un poco en descargarse de Internet y además el proceso de instalación será delicado, por lo que es conveniente realizar un respaldo de nuestros datos antes de hacerlo.