Foo Fighters y las promesas

Nos encontramos con delay para hablar de Foo Fighters, el jueves 15 de enero del 2015. El show que abrió la temporada de grandes conciertos y a la vez, el más vilipendiado en mucho tiempo por su cambio de recinto (del coliseo central a la pista atlética del Estadio Nacional), por sus precios y por la aparente irrelevancia de la banda de Dave Grohl.

Frente a frente, en la partida de la fase sudamericana del tour mundial de su disco Sonic Highways, se empezaron a comprobar las gracias de la banda: un líder carismático, una banda que suena como corresponde al contexto, el escenario y los precios, canciones efectivas para emocionarse y perder la voz, y ese sano entretenimiento del Rock & Roll que lleva al conjunto entre la música, el espectáculo y la efervescencia de la gente a un nuevo nivel.

El de Foo Fighters, en resumen, es un show donde se promete. Que va a ser largo, que somos el mejor público del mundo, que la partida de la gira ha sido insuperable y tantas otras triquiñuelas de rockero. Pero uno a Grohl le cree todo porque se comporta como lo haría cualquiera de nosotros si tuviéramos el talento y el valor de colgarnos una guitarra al hombro y la chance de tocar para tanta gente que te sigue y te ama. Que eso produzca escozor o admiración va en cada cual y ahí está la clave para entender el fenómeno de Foo Fighters aquí, en Inglaterra, Japón o Sudáfrica: la proyección en cada uno de nosotros.

Foto: Agencia Uno

Resguardados en un escenario gigante, Grohl solo al final de una larga pasarela o haciendo un set de covers de clásicos del rock en una plataforma giratoria en medio de la cancha, el grupo se exige a la medida de un público ansioso, emocional y exigente que recibe lo que espera: neoclásicos desde el inicio con “This Is A Call”, “Learn To Fly” y “Breakout”, una carga ligera de sus temas nuevos y las ganas de exprimir cada single con solos e improvisaciones que alargan la experiencia que muchos tuvieron de escuchar las canciones de sus vidas como nunca más iban a poder hacerlo… O esa impresión quedaba.

Lo más malo de un show de Foo Fighters es que se acaba y la promesa con más chances de hacerse realidad, se cae. Bordeando las 3 horas de show, se termina y no hay nada que hacer más que lamentar las canciones que faltaron (“Next Year”, “Walking After You”, “Long Road To Run” y un montón más que podrían haber cumplido la promesa de la noche entera sobre el escenario), pensar en lo lindo que habría sido ver un show como ése en el estadio y la sentencia inminente de un nuevo día laboral que, para muchos, se suele hacer más llevadero al son de estos gringos que son como un@.

PS**Parece que tenemos de qué sentirnos especiales. De verdad pasaron cosas que no siguieron pasando, como esta versión del “Ole, Ole, Ole” que dio la vuelta al mundo… Y no, no le dijo a los argentinos los mismo que a nosotros. 🙂

No te pierdas al final del por la galería de imágenes. (Fotos: Agencia Uno)

Setlist:

This Is A Call
Learn To Fly
Breakout
Arlandria
The Pretender
My Hero
I’ll Stick Around
In The Clear
Cold Day In The Sun
Big Me
Monkey Wrench
Congregation
Walk
Sink & Bones
Wheels
Times Like These
School’s Out (Alice Cooper)
Ain’t Talking ‘Bout Love (Van Halen)
Miss You (Rolling Stones)
Stiff Competition (Cheap Trick)
Under Pressure (Queen & David Bowie)
All My Life
These Days
Outside
Best Of You
Everlong