El robot que ayuda a niños enfermos a estudiar y superar la soledad
Cuando los niños deben mantenerse aislados o lejos de la escuela, debido a una enfermedad prolongada, lo más complejo es superar la soledad y el hecho de quedarse atrasados con sus estudios.
Pensando en cómo resolver esto, es que nace el robot educativo AV1, cuya labor es ser los ojos, los oídos y la voz de estos niños, acompañándolos y motivándolos a seguir aprendiendo.
¿Cómo funciona?
El robot es una especie de interlocutor entre el niño enfermo y su escuela y compañeros.
El robot físico está en medio de la sala de clases, entonces si el niño enfermo quiere ser parte de la clase, hacer una pregunta o simplemente comunicarse con sus compañeros; a través de una tablet lo contacta y el robot enciende su cabeza y lo comunica vía streaming con el curso.
Lo que habla el niño, el robot lo procesa y lo repite en el aula, y lo mismo con las respuestas que los alumnos o la profesora quieran darle.
El robot es fabricado por la empresa social noruega No Isolation, que se fundó para reducir el aislamiento involuntario. En Europa 370 jóvenes de entre ocho y 20 años, que en su mayoría viven en países escandinavos, usan un AV1.
¿Cómo adquirirlo?
Los colegios pueden arrendar el robot o comprarlo por 3.065 dólares. El costo del AV1 de Smith, que sus compañeros bautizaron “Bob”, se cubrió con una colecta y filántropos.