Desarrollan tecnología que facilita el uso de implantes inteligentes en el cuerpo

Por Alexandra Ximenez

En la Universidad de Stanford, se ha logrado desarrollar una tecnología que promete grandes avances en cuanto a implantes se refiere.

Un equipo de ingenieros de la prestigiosa universidad asignados a este proyecto, han sido capaces de crear un implante del tamaño de un grano de arroz, y con el que se podría en un futuro -esperemos que no muy lejano- poder llevar a cabo el monitoreo de condiciones médicas o funciones vitales (presión arterial, ritmo cardiaco y más) de una forma mucho más práctica y segura.

Esto representa un importante avance ya que en la actualidad los implantes como los marcapasos, a pesar de tener una larga vida, aún son de un tamaño considerable y en algunos casos el cambio de baterías para estos dispositivos puede ser complejo (es necesario a veces someter al paciente a una nueva cirugía para realizar este procedimiento).

Hasta el momento, la tecnología desarrollada por la Universidad de Stanford ha sido probada en animales únicamente, y aunque no se sabe cuánto tiempo pueda tomar para que sea llevada al campo médico humano, tenemos la esperanza de que con este diminuto dispositivo, nuestra salud podría verse mejorada de forma considerable al poder llevar a cabo este implante tareas específicas sobre órganos dañados o incluso en nervios. 

Otro dato de interés es que dicho implante podría incluso encontrarse en zonas del cuerpo muy específicas, y para poder funcionar no sería necesario hacer cambios de baterías por medio de cirugía, sino que este podría recargarse con las mismas ondas que se producen y que viajan por nuestro cuerpo.