La Saga Crepúsculo: Amanecer parte II.

Anteriormente, en la Saga Crepúsculo…

La Saga Crepúsculo se trata de una flaca cara de vela que no le gusta nada (Vela) que llega a vivir a Algarrobo y se enamora de un vampiro cara de portazo con la piel color Pin-Pon y las mechas tiesas de Robotech (Pimpotech, de cariño). El drama es que Pinpotech tiene en verdad trescientos años y todavía no sale del colegio, y la diferencia de edad con Vela es tan grande así que son como la Miss Chile que pololeaba con su abuelito y pasan peleando.

Un día unos vampiros fashion se quieren comer a Vela por apestosa, y Pinpotech la defiende y mata a uno de los fashion, por lo que el resto jura venganza y empiezan a seguir a la comadre y a decirle te cocinaste, Vela. Aquí aparece el Hombre Lobo Pascuense que vive con sus amigos pascuenses en el bosque y entre todos hacen pesas y se depilan los pectorales. El Hombre Lobo Pascuense también es seducido por el rostro expresivo de Vela así que empieza a competir por su amor con Pinpotech. Vela no se decide si pololear con al abuelito de trescientos años o con el fisicoculturista que se transforma en lobo, pero un día está de cumpleaños y se corta el dedo con papel de regalo así que Pinpotech la patea por el hecho de tener sangre. Pinpotech se siente tan mal por esto que decide ir a Italia a mostrar su guata blanca desde una torre mientras Vela se tira por un barranco, etc. Al final Pinpotech le pide matrimonio a Vela y todos para dentro.

Después Vela no quiere casarse porque hay que hacer durar más las películas así que nos tramitan un rato más. Los vampiros fashion vuelven a atacar a Vela y esta vez Pinpotech hace una alianza con los hombres lobo para derrotar a los fashion y lo consiguen, por lo que en agradecimiento Vela le dice al Hombre Lobo Pascuense que se va a casar con Pinpotech (guaja). El Hombre Lobo Pascuense está furioso pero no se le nota porque tiene la frente muy grande y los ojos muy chiquititos pero decide ir a correr bajo la lluvia. Cuento corto: Vela queda embarazada de Pinpotech, tiene una guagua mutante que crece a súper velocidad y el Hombre Lobo Pascuense se enamora a primera vista de la guagua recién nacida lo juro. Ah y Pinpotech transforma a Vela en vampiro para que no muera durante el parto. ¿Entendieron?

En La Saga Crepúsculo: Amanecer parte II se descubre que Velpotech (la guagua de Vela y Pinpotech) además de tener súper crecimiento tiene movimientos súper cripi, porque es una guagua digital de efectos especiales modernos. Es una de las abominaciones más espantosas jamás creadas pero cuando la muestran por primera vez todos en el cine hicieron “Aaaw”, lo que demuestra que no hay guagua fea y con razón todos encontraban lindo a mi primo Feto cuando nació. Si el compadre parece Feto ahora imagínense lo que parecía cuando nació, con decirles que hasta el doctor le decía la guagua pesadilla de Stephen King.

Pero no nos desviemos, estábamos hablando de la guagua horrible Velpotech. Resulta que además de fea, la guagua es ilegal en el mundo vampírico, porque los vampiros son más evolucionados que los humanos y aprendieron que las guaguas son un cacho, y siempre están llorando y se creen la gran cosa cuando en verdad no hacen nada y no saben ni sentarse. Vela y Pinpotech saben que Velpotech corre peligro de ser eliminada por los Voltutti, que son unos vampiros malos de pelo largo que viven en un templo leyendo pergaminos y hablando susurrado por lo que todos les tienen miedo. Entre los Voltutti está una comadre con poderes mentales, un viejujo igual a Largo de Los Locos Addams pero con peluca de señora, y el líder, que es un compadre medio Mr. Bean pero con los ojos rojos que no parpadea nunca. En resumen, los Voltutti son lejos lo más terrorífico que he visto en mi vida, y si ellos quisieran matar a mi guagua, se las dejaría envuelta en papel de regalo a una cuadra de mi casa para que no se acerquen.

Ah se me había olvidado decirles que en esta película todos los vampiros son como X-Men, además de ser vampiros. Hay una que ve el futuro, otro que manipula los elementos, otro que le pega combos al suelo y hace grietas, etc. Y es justamente la vampira X-Men que ve el futuro la que descubre que los Voltutti vienen a buscar a la Velpotech. Se van a demorar en llegar eso sí, así que los vampiros empiezan a armar un plan consistente en buscar muchos “testigos” que le digan a los Voltutti que la guagua en verdad es piola y no le hace daño a nadie, para que los Voltutti digan “bueno ya” y dejen a Velpotech en paz. Como el Hombre Lobo Pascuense está perdidamente enamorado de la guagua (lo juro) ahora Pinpotech y Vela son sus suegros así que los ayuda, y convence a sus amigos hombres lobo para que enfrenten a los Voltutti en caso de que no se compren que la guagua es piola, así que la preparación es de mucha tensión esperando la batalla que pudiere o no ocurrir (es para morderse las uñas).

¿Y saben qué? Cuando finalmente llega la pelea contra los Voltutti debo confesar que lo pasé CHANCHO porque la batalla tiene muchos más momentos Ándate Cabrito de los que anticipé. (Momentos Ándate Cabrito anticipados: Cero). Para ser una pelea de vampiros contra vampiros con la participación especial de los hombres lobo, esta es una excelente pelea de X-Men contra X-Men, para qué estamos con cosas. Entre la comadre que tira rayos telepáticos de dolor, la otra que tira campos de fuerza, el que le pega combos al suelo y hace terremotos, la vampira que tira rayos de las manos, etc. SIEMPRE hubo algo entretenido que mirar, incluyendo unos momentos que juro sobre la tumba de mi Primo Feto parecían más de Dragon Ball Z que de la saga de los musculosos sin polera en el bosque con carita de pena.

Igual, no se hagan ilusiones, no estoy diciendo que la pelea es tan buena como las de X-Men o Matrix (ni por si acaso), pero es diez millones de veces más entretenida de lo que pensé. Sobre todo porque pasan cosas heavy que no me esperaba, como ese personaje al que Mr. Bean Vampiro le corta la cabeza en el aire. No me lo esperaba. Y a propósito, hay más decapitaciones en esta batalla que en cinco minutos de un capítulo de The Walking Dead, lo cual es mucho decir. Como todos los vampiros tienen súperfuerza y están hechos de plumavit, puro vuelan brazos, torsos, cabezas y piernas, y un no alcanza ni a decir “Y yo que quería dormir siesta” cuando ZUÁCATE, un lobo se está fileteando a un Voltutti. Con decirles que hasta Pinpotech se manda un momento Superman y todas las comadres en la sala desmayadas porque estaban acostumbradas a verlo con carita de pena mirando por la ventana. Así que felicitaciones, Pinpotech.

Yo en verdad no sé si es porque venía de ver Caleuche: El Llamado del Mar o qué, pero les juro que lo pasé mejor que en todas las Crepúsculo anteriores combinadas, y eso que con varias de esas me reí caleta. Hay muchos efectos especiales que dan pena y dan ganas de ponerles una estrellita a la lástima (como la guagua cripi, o cuando Vela anda volando por los bosques cazando a Bambi) pero varios otros les quedaron bien, por fin. Los lobos gigantes de computación por ejemplo ya no se ven tan ordinarios como antes, así que bacán, más vale tarde que nunca. Además cuando son lobos están siempre enojados y gruñendo y mirando feo, por lo que es justo decir que la versión lobo del Pascuense es mucho mejor actor que la versión humano del Pascuense. Y se ve mejor con la Velpotech que también es digital (tienen mucho en común, almas gemelas).

Así que mi veredicto es que me gustó, saben qué. Definitivamente es la mejor de todas las Crepúsculo y la que menos va a aburrir a los pobres compadres que tienen que ir al cine obligados acompañando a su polola/hermana chica/sobrina/Miss Chile. El vampiro Mr. Bean es muy gracioso además, y repito que la batalla final tiene momentos maestros. Lo que sí hicieron trampa en la batalla final y salieron con una sorpresita que no a todos les va a gustar, pero que yo encontré filete, porque tiene un mensaje que les puede servir a todos los que odian Crepúsculo y a cualquier serie de películas basadas en libros de mil páginas. A los que odian Harry Potter, a los que creen que Los Juegos del Hambre le vuela el traste a todas las anteriores, incluso para los fanáticos de El Señor de los Anillos que se creen la muerte porque los libros son más viejos y más enredados. Nerds de todas las sagas: Vivamos en paz sin pelear, ¿ya? El planeta es grande y hay espacio para todos, así que no nos andemos mordiendo la cabeza por tonteras. Atentamente, Hermes Antonio, emisario de la paz. Gracias.

Ah el veredicto: Eh, doscientos millones setecientas mil quinientas cuatro estrellas y un Araña en la Almohada Award a esta película, por pillarme desprevenido y sorprenderme tanto. Cuando estrenen la próxima la voy a ir a ver feliz, ¡que salga luego!

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